Mi maternidad me transformó por completo. Me sentí fragmentada, desbordada, y poco a poco fui reconstruyéndome.
Como en Japón, aprendí a unirme con oro: a mirar cada grieta como parte de mi historia, no como algo que debía ocultar.
Desde ahí acompaño: sabiendo que no hay que tapar lo que duele, sino honrarlo y hacerlo bello.
Siempre he estado conectada con lo humano. Creo que en cada oscuridad hay una chispa de luz esperando ser vista.
Y yo estoy en búsqueda constante de esa luz: para mí, para quienes amo y para cada persona que me confía su historia.
No intento arreglar. No doy soluciones rápidas. Estoy para sostener, no para dirigir.
Donde puedas respirar, expresarte, estar como estás. Puedo hablar si lo necesitas o estar en silencio si eso alivia. Y si no soy la persona adecuada, también estoy para ayudarte a encontrar a quien sí lo sea.
Con el que comparto valores y forma de estar. Tejemos una red invisible pero poderosa, para cuidar mejor.
Acompaño a familias que viven la muerte de su bebé durante el embarazo, el parto o el posparto. Estoy en el diagnóstico, en la decisión, en el parto, en la despedida o simplemente cuando hace falta que alguien esté.
Acompaño partos sin complicaciones desde el plano emocional. Si me necesitas, puedo estar presente. Y si no soy la indicada, te ayudo a encontrar a quien sí.
Tatuo desde 2018, en mi estudio Tatuajes Hechos con Amor (Cerdanyola del Vallès). Puedes venir a tatuarte algo con un significado profundo o simplemente algo que te guste. Todo lo que se hace con intención, tiene valor.
Acompaño a través del arte: Esculturas, ilustraciones, símbolos, detalles. Todo puede ser memoria, si se hace con cuidado.
Soy instructora de buceo desde hace más de 12 años. He trabajado en SubMaldives con Judith de la Rosa, en Xpu-Ha (México), y he guiado expediciones en Egipto y en muchas zonas de España. Mi especialidad son las personas con miedo al agua o que creen que no podrán. Ahí también acompaño: desde el cuerpo, la respiración y la confianza.